Los Consejeros del Rey Hidropsio es uno de los cuentos que componen la célebre colección "Fábulas de robots" (Bajki robotów, 1964) de Stanisław Lem. Esta serie de relatos se enmarca en un universo de ciencia ficción satírica y cuasi-medieval, donde los protagonistas son robots, autómatas y máquinas que han heredado y distorsionado las peores cualidades de la humanidad.
El relato se centra en el rey Hidropsio del reino de Acuacia, un monarca caprichoso y, como sugiere su nombre, obsesionado con el agua (aunque en el contexto de robots esto puede interpretarse como su "fluido vital" o programa). Deseando un heredero al trono que sea digno de su legado y satisfaga sus peculiares gustos, encarga a sus consejeros más sabios la tarea de crearlo. Aquí es donde reside la esencia del cuento: la rivalidad y la mezquindad de los consejeros. Cada uno, motivado por su propia ambición, ideología y deseo de congraciarse con el rey, propone un diseño para el príncipe totalmente opuesto al de sus colegas. En lugar de colaborar para un bien común, se enzarzan en una lucha de egos y proyectos. La resultante decisión, una suerte de compromiso absurdo para calmar los ánimos, es implantarle al heredero una "matriz de amor por las pequeñas cosas".
Esto, lejos de crear un príncipe equilibrado, provoca en el heredero una obsesión por la miniaturización, desencadenando una espiral de locura y absurdo que amenaza la estabilidad del reino.
Como es habitual en Lem, este relato no es solo fantasía, sino una ácida sátira social y política. El cuento se burla de:
La ineficacia de la burocracia y el gobierno: Los consejeros representan a los expertos y tecnócratas que, a pesar de su inteligencia, son incapaces de cooperar y cuyas decisiones, tomadas por vanidad o compromiso, tienen consecuencias catastróficas.
La soberbia intelectual: Los "sabios" están más preocupados por demostrar su superioridad y la validez de su propia teoría (su "ciencia") que por la practicidad o el bienestar del reino.
El peligro de los compromisos mal concebidos: El intento de complacer a todos resulta en un desastre aún mayor, una crítica a las soluciones políticas que priorizan la paz superficial sobre la coherencia lógica.
El estilo de Lem es inconfundible: una mezcla de fábula tradicional con elementos de ciencia ficción futurista/robótica. Utiliza un tono irónico y humorístico, a veces con tintes de humor negro. La narrativa adopta un aire de "leyenda o cuento de hadas" adaptado a la era robótica, lo que subraya la atemporalidad de las estupideces humanas y, por extensión, las robóticas.
Conclusión
"Los consejeros del rey Hidropsio" es un relato inteligente y muy entretenido que encapsula la genialidad de Stanisław Lem. Es una lectura obligatoria para quienes disfrutan de la ciencia ficción que utiliza la fantasía para realizar una profunda y divertida crítica a la condición humana (o, en este caso, robótica). Demuestra cómo el ego, la ambición y la falta de visión pueden corromper la sabiduría, incluso en el futuro. Es un cuento que permanece relevante al ilustrar que, sin importar la tecnología o la era, los problemas fundamentales de la política y la naturaleza humana persisten.






