sábado, 9 de diciembre de 2023

La Divina Comedia

En el oscuro umbral del siglo XIV, un poeta italiano de renombre, Dante Alighieri, se embarcó en un viaje literario que trascendería su propia vida para convertirse en una de las obras maestras de la literatura mundial. Este poema épico, conocido como "La Divina Comedia", se erige como un faro de la imaginación humana, un relato inmortal que ha guiado a generaciones de lectores a través de los oscuros abismos del Infierno, los liminares del Purgatorio y hacia la gloriosa luz del Paraíso.

Dante, un hombre de profunda erudición, exiliado de su Florencia natal, tejió su visión del más allá, inspirado por una devoción inquebrantable y una rica tradición literaria. "La Divina Comedia" es un poema épico, pero es mucho más que eso. Es un viaje espiritual, un viaje de redención y autorreflexión en el que el protagonista, Dante mismo, recorre un sendero que representa la lucha del alma humana por encontrar su lugar en el universo y su relación con lo divino.

El Infierno de Dante es una visión espeluznante del castigo para los pecadores, una galería de horrores meticulosamente descritos que desafían nuestra concepción de lo que es el mal. El Purgatorio, en contraste, es un lugar de purificación y esperanza, donde las almas se preparan para ascender al Paraíso. Y el Paraíso es un éxtasis celestial, un reino de luz y conocimiento en el que el lector se sumerge en la contemplación de lo divino.

A lo largo de su viaje, Dante se encuentra con una galería de personajes históricos y mitológicos, así como con seres celestiales y demoníacos. Cada encuentro es una oportunidad para explorar temas universales como la justicia, el amor, el libre albedrío y la gracia divina. A través de su poesía magistral, Dante nos invita a reflexionar sobre nuestra propia condición humana y nuestra búsqueda de un significado trascendental.

"La Divina Comedia" es una obra que desafía el tiempo y el espacio, cuyos versos trascienden las barreras culturales y lingüísticas para tocar los corazones de las personas en todo el mundo. En esta epopeya, Dante Alighieri nos muestra que el viaje hacia lo divino es un viaje universal, un viaje que todos los seres humanos emprenden en su búsqueda de sentido y redención.


Dante Alighieri, nacido en Florencia en 1265, vivió en una época de convulsión política y cultural en Italia. Exiliado de su ciudad natal debido a las luchas internas entre facciones políticas, Dante canalizó su pasión y su deseo de comprender el mundo y el alma humana en la creación de esta epopeya monumental. La "Divina Comedia" no solo es una obra maestra de la literatura, sino también un testimonio de la búsqueda incansable del hombre por la verdad, la justicia y la redención en medio de un mundo marcado por la corrupción y el caos.

Dante no solo nos ofrece una visión detallada de los reinos ultraterrenales, sino que también nos invita a un viaje de autoconocimiento y autorreflexión. A través de las experiencias de su protagonista, Dante mismo, los lectores pueden verse reflejados en los desafíos y dilemas de la existencia humana. A medida que avanzamos a través de los versos de esta obra maestra, somos confrontados con nuestras propias elecciones morales y espirituales, y nos vemos impulsados a considerar nuestro propio camino hacia la redención.

Así, "La Divina Comedia" de Dante Alighieri es una obra que perdura como un faro en la literatura y la filosofía, una obra que nos recuerda que el viaje de la mente humana hacia lo divino es una búsqueda universal que trasciende el tiempo y el espacio. En sus versos, encontramos un espejo en el que podemos contemplar nuestros propios anhelos, luchas y aspiraciones. Es una obra maestra que sigue siendo un monumento a la imaginación humana y un testimonio eterno de la búsqueda de la verdad, la justicia y la redención en el corazón de cada ser humano.

Es invitado el lector a adentrarse en este viaje épico a través de las palabras de Dante y a explorar los misterios y maravillas de "La Divina Comedia", una obra que perdura como un faro de la literatura y la espiritualidad.




domingo, 3 de diciembre de 2023

Los Hijos de la Noche

Los Hijos de la Noche (The Children of the Night) es un relato de terror del escritor norteamericano Robert E. Howard (1906-1936), publicado originalmente en la edición de abril-mayo de 1931 de la revista Weird Tales, y luego reeditado por Arkham House en la antología de 1963: El hombre oscuro y otros (The Dark Man and Others).

Es uno de los mejores cuentos de Robert E. Howard, relata la historia de dos amigos entrañables, quienes accidentalmente recuperan sus recuerdos genéticos, lo cual los convierte instantáneamente en enemigos mortales.

En La gente pequeña (The Little People) de Robert E. Howard, el protagonista vuelve a ser miembro de una tribu celta prehistórica al ver a su hermana siendo acosada por una criatura infernal cerca de un antiguo templo druida. En El pueblo de la oscuridad (People of the Dark), el narrador queda inconsciente al caer por unos escalones rocosos, y recupera la conciencia como uno de los primeros Conan. En Los Hijos de la Noche, un golpe accidental en la cabeza con un antiguo mazo de pedernal transforma a John O'Donnel en Aryara, un miembro de una tribu aria. En las dos últimas historias, la conmoción cerebral despierta el recuerdo racial de escenas muy vívidas y sangrientas. Podemos pensar que Los Hijos de la Noche es la historia el triunfo de los impulsos ancestrales, preservados por una especie de memoria racial [no genética] (ver: El horror hereditario y la enfermedad de Lovecraft)

El principio básico parecería ser que un evento traumático, como una conmoción cerebral leve, es suficiente para activar estos recuerdos raciales, prehistóricos, e incluso personalidades ancestrales en un individuo perfectamente civilizado. Detrás de nuestra mirada racional hay un cerebro hirviendo de odio latente por el Otro. En Los Hijos de la Noche de Robert E. Howard, este Otro es una raza de criaturas con cuerpos atrofiados, extremidades desgarradas, ojos como cuentas de serpientes y rostros grotescos y cuadrados de rasgos inhumanos. Estas simpáticas criaturas viven en cavernas y túneles debajo de la apacible campiña inglesa. Al igual que los Ghouls de H.P. Lovecraft, esta raza subterránea es capaz de cruzarse con respetables humanos y engendrar híbridos bastante desagradables, como Richard Upton Pickman (ver: De la luz a la oscuridad: psicología de «El modelo de Pickman»)

Los Hijos de la Noche comienza con una reunión de amigos en un estudio lleno de libros prohibidos y artefactos antiguos. Los hombres son profesores bien educados cuyo principal interés parece ser el estudio de la estructura del cráneo y la mandíbula, y la conexión que estas características tienen con el carácter racial. Los mediterráneos tenían la cabeza tan larga como los arios; ¿la mezcla entre estos pueblos dolicocefálicos produciría un tipo intermedio de cabeza ancha? —pregunta apasionadamente uno de los hombres. Hay algo de discusión sobre libros antiguos presentes en el estudio; entre ellos, el Necronomicón [resulta intersante la noción de que el Necronomicón contiene ideas que solo tienen sentido a la luz de la ciencia actual] y el Unaussprechlichen Kulten. También se debate la supervivencia de cultos perhistóricos que adoran a Cthulhu, Yog Sothoth, Tsathoggua, entre otros. Pero esta es una digresión del enfoque principal de la historia, que es la raza. El narrador continúa clasificando a sus amigos según su categoría racial: Cada uno de los seis de nosotros era de la misma raza, es decir, un británico o un estadounidense de ascendencia británica. Pero Ketrick, el séptimo individuo, no lo es. El lector perspicaz lo identificará rápidamente como un probable descendiente mestizo de aquella subterránea raza de reptilianos. Es miembro de una minoría.

Mientras manipula imprudentemente un antiguo martillo de sílex en el estudio, Ketrick golpea accidentalmente a O'Donnel con él, lo cual parece bastante sospechoso. Mientras está inconsciente, O'Donnel tiene una visión de una antigua escaramuza en la que finalmente se vio atrapado por los siniestros Hijos de la Noche, no sin antes despedazar a varios de ellos. Cuando despierta, intenta sin éxito matar a Ketrick. Ahora es O'Donnel, pero también Arayara, un guerrero ario prehistórico. Ambas personalidades están ahora activas en un solo individuo.

El epílogo de Los Hijos de la Noche es la parte más escalofriante. La experiencia de O'Donnel no le aporta mayor comprensión, sabiduría o paz, aunque él afirma que le abrió los ojos. Más bien, el narrador proclama su teoría racial, aria y determinista, la cual asegura que los de su clase siempre estarán en guerra sangrienta con los Hijos de la Noche. El relato es notable, y prefigura el estallido de las hostilidades que condujeron a la Segunda Guerra Mundial. Robert E. Howard y algunos contemporáneos, como Lovecraft, ciertamente respiraron este aire a principios de los años treinta. Pero, para ser justos, Robert E. Howard no parece tan preocupado por clasificar a los diferentes grupos raciales o étnicos como a menudo lo hace H.P. Lovecraft. Su enfoque parece estar dirigido a la idea de que ciertas tensiones raciales son antiguas, e inevitables, porque están en la sangre. La opinión es profundamente conservadora. En medio de la sangre y los cráneos rotos, es la naturaleza, no la crianza, la que triunfa.

¿Quiénes son los Hijos de la Noche? O'Donnel los describe del siguiente modo:

En cierto modo eran humanos, aunque no los consideré tales. Eran bajas y fornidas, con anchas cabezas demasiado grandes para sus flacos cuerpos. Su cabellera era enmarañada y lacia, sus rostros anchos y cuadrados, con narices chatas, ojos horriblemente sesgados, una delgada apertura por boca y orejas puntiagudas. Llevaban pieles de animal, como yo, pero esas pieles estaban trabajadas toscamente. Portaban arcos pequeños y flechas con punta de pedernal, cuchillos de pedernal y garrotes. Y conversaban en un lenguaje tan horrible como ellos, un lenguaje siseante y reptilesco que me llenó de pavor y repugnancia (ver: Las lenguas prehumanas en Lovecraft)


Fuente:

https://elespejogotico.blogspot.com/2011/09/los-hijos-de-la-noche-robert-e-howard.html



sábado, 25 de noviembre de 2023

El Hombre de los Relojes

El Hombre de los Relojes (en inglés The Story of the Man With the Watches) es un relato corto escrito por Arthur Conan Doyle en 1898. Pertenece a la serie Round the Fire de The Strand Magazine.

Es un día lluvioso y horrible en Londres en marzo de 1892, y se ve a dos figuras apresurándose para tomar el expreso de las cinco en punto desde la estación de Euston hacia Manchester. Uno es un hombre alto de unos cincuenta años, cuyos rasgos están ocultos por el cuello de Astracán vuelto hacia arriba de su abrigo. Su compañera es una joven alta, su rostro oscurecido por un velo. Rechazan un compartimento para fumadores cuyo único ocupante, un hombre barbudo de mediana edad, se ve claramente afectado por su repentina aparición. Intenta hablar, pero sus palabras se pierden en el ruido del tren que sale. Se detiene brevemente en Willesden a las 5:12 pm, y luego nuevamente en Rugby a las 6:50 pm, donde la puerta abierta de un carruaje de primera clase llama la atención. Los tres pasajeros ahora han desaparecido, y en su carruaje está el cuerpo de un joven que recibió un disparo en el corazón. No hay pista de su identidad pero, curiosamente, posee seis valiosos relojes de oro, todos de fabricación estadounidense...

Se escribió en 1898 cuando Conan Doyle necesitaba fondos para completar Undershaw, su casa familiar privada en Surrey. Además, escribió las doce historias de Round the Fire entre el 13 de marzo y el 5 de octubre de 1898, con un total de 76.000 palabras en siete meses. Round the Fire se publicó en serie en The Strand Magazine desde junio de 1898, siendo esta la segunda historia y El tren especial desaparecido la tercera.


domingo, 19 de noviembre de 2023

Una Rosa Para Emily

Una Rosa Para Emily (A Rose for Emily) es un relato gótico del escritor norteamericano William Faulkner (1897-1962), publicado en la edición del 30 de abril de 1930 de la revista The Forum. La historia nos ubica en la Tierra Media de William Faulkner: el pueblo apócrifo de Jefferson, Mississippi, en el ficticio condado de Yoknapatawpha.

Una rosa para Emily inicia la tradición del gótico sureño (Southern Gothic), un subgénero de lo macabro situado en el sur de los Estados Unidos, donde lo perturbador, lo excéntrico, lo grotesco, lo decadente, lo siniestro, encuentra un caldo de cultivo que humea desde la pobreza, el crimen y la violencia.

En Una rosa para Emily, uno de los más conocidos cuentos de William Faulkner, se nos introduce en una realidad oscura, repleta de privaciones intelectuales y, en cambio, prolífica en supersticiones y costumbres vetustas acerca del rol de la mujer en la sociedad. Se trata, en resumen, de la historia de una mujer aislada emocionalmente del resto, pero físicamente esclava de su comunidad.

A simple vista, el título de este notable cuento de William Faulkner —Una rosa para Emily— parece inadecuado para el argumento; sin embargo, el autor declaró que deseaba rendirle tributo a la tragedia de su personaje. Emily Grierson; de tal modo que decidió regalarle una rosa.

El relato tiene cinco secciones, separadas con un asterisco. En cada una se presentan dos hechos, uno al principio y otro al final, con el objetivo de generar cierta expectativa en el lector e incitarlo a continuar con la sección siguiente. El cuento está narrado en primera persona del plural representando, en cierta forma, la voz del pueblo, que da su opinión sobre los hechos. Como en otras historias de Faulkner, el tiempo no corre lineal, sino dando saltos temporales.

El título del relato ha tenido múltiples interpretaciones. Una de ellas relaciona la rosa con el comienzo del cuento: el funeral de Emily. En un funeral es habitual que haya una rosa. Otra, con un acto de generosidad de Faulkner hacia su personaje: le regala un rosa demostrando su compasión por la vida trágica que Emily vivió. En otra interpretación, la rosa simboliza el cuerpo muerto de Homer, si se ve a la flor como muerta o su sangre (suponiendo que la rosa del título sea roja), ya que fue asesinado. Podría ser, también, la sangre que habría derramado Emily si hubiera perdido la virginidad o su vida que se fue marchitando como una rosa.


William Faulkner

William Cuthbert Faulkner (New Albany, 25 de septiembre de 1897-Byhalia, 6 de julio de 1962) fue un escritor estadounidense, reconocido mundialmente por sus novelas experimentales y galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 1949 «por su poderosa y artísticamente única contribución a la novela contemporánea estadounidense».​ También escribió relatos, guiones cinematográficos, ensayos y una obra de teatro.

Faulkner es considerado universalmente como uno de los más importantes creadores de la literatura estadounidense en general y de la literatura sureña en particular, y como uno de los principales modernistas estadounidenses de la década de 1930, en la tradición experimental de escritores europeos como James Joyce, Virginia Woolf, Marcel Proust y Franz Kafka, y conocido por su uso de técnicas literarias innovadoras, como el monólogo interior, la inclusión de múltiples narradores o puntos de vista y los saltos en el tiempo en la narración. Su influencia es notoria en la generación de escritores hispanoamericanos de la segunda mitad del siglo xx. García Márquez en Vivir para contarla y Vargas Llosa en El pez en el agua reconocen su influencia.

Nació en New Albany, Misisipi, aunque se crio en las cercanías de Oxford, lugar al que se trasladó la familia en 1902. Era el mayor de cuatro hermanos de una familia tradicional sureña formada por Murry Cuthbert Falkner (1870-1932) y Maud Butler (1871-1960). Tuvo tres hermanos menores: Murry Charles "Jack" Falkner, el escritor John Faulkner y Dean Swift Falkner.

sábado, 11 de noviembre de 2023

Los Niños de la Charca

Los Niños de la Charca (The Children of the Pool) es un relato de terror del escritor galés Arthur Machen (1863-1947), publicado en la antología de 1936: Los niños de la charca y otras historias (The Children of the Pool and Other Stories).

Los niños de la charca, sin dudas uno de los grandes relatos de terror de Arthur Machen, se desprende de los ingredientes típicos en la obra del autor, aspirando más al terror psicológico que a lo sobrenatural.

El argumento de Los niños de la charca relata la historia de un hombre que, tras visitar una charca de aspecto más bien tenebroso, depresivo, empieza a recordar, o mejor dicho, a ser acechado, por sus indiscreciones pasadas, como si de alguna forma la charca lo volviera consciente de sus sentimientos de culpa. De esta forma, Arthur Machen plantea sus reservas acerca del método psicoanalítico, al cual considera un delirio sin ninguna clase de sustento.

Aunque el escenario de este cuento de Arthur Machen parece sobrenatural al principio, es en realidad uno de los pocos ejemplos en donde las explicaciones racionales de lo que realmente está ocurriendo resultan mucho más interesantes que las sobrenaturales.

Un resumen de Los niños de la charca de Arthur Machen podría ser el siguiente:

Un hecho indiscreto, terrible, se desarrolla en el pasado, quemándose lentamente en el alma del protagonista. El tiempo transcurre, los hechos se olvidan, pero la culpa continúa erosionando los abismos de su mente, en aquellos resquicios subconscientes a los que no tenemos acceso. Entonces aparece un espejo de aquellos pecados; una forma negra, espesa, pestilente, simbólica, de aquella charca, ideal para que los monstruos del pasado se abran camino hacia la superficie de la consciencia.


Fuente:

https://elespejogotico.blogspot.com/2009/08/los-ninos-de-la-charca-arthur-machen.html



jueves, 9 de noviembre de 2023

Arthur Machen

Arthur Machen (3 de marzo de 1863 - 15 de diciembre de 1947), escritor galés de finales del siglo xix e inicios del siglo xx, mayormente conocido por su influyente literatura sobrenatural y de terror fantástico. Su novela corta El gran dios Pan ha ganado la reputación de ser un clásico del horror hasta el punto de que Stephen King lo ha declarado «quizás el mejor [relato de terror] en el idioma inglés». Declaraciones similares se han hecho de otra de sus obras, El pueblo blanco. Es también conocido por ser el principal creador del mito de los Ángeles de Mons, leyenda relacionada con las tropas británicas durante la I Guerra Mundial.

Nacido bajo el nombre de Arthur Llewellyn Jones, en Caerleon-on-Usk, en Monmouthshire, condado de Newport, al sur de Gales, el 3 de marzo de 1863 en Caerleon, Reino Unido. Hijo del pastor anglicano John Edward Jones, el joven Arthur creció en la rectoría. La educación cristiana sería fundamental más tarde para sus escritos. En aquel entonces su padre adoptó el apellido de soltera de su madre, Machen, para heredar cierto patrimonio siendo Jones-Machen, y su hijo utilizaría sencillamente el nombre de Arthur Machen. El amor de Arthur Machen por la belleza de su tierra galesa de Gwent, con sus frondosos bosques e interminables campiñas, además de sus raíces históricas célticas, romanas y medievales, constituyeron uno de los epicentros más importantes de su literatura.

A los once años Machen entró en la Hereford Cathedral School, donde recibió una educación clásica que reforzó más su amor por la herencia romana y medieval de su tierra; pero tras terminar sus estudios básicos no pudo asistir a la universidad debido a la pobreza familiar. Machen marchó a Londres donde realizó los exámenes para entrar en la escuela médica, pero los suspendió. A pesar de todo empezó a mostrar su calidad como joven promesa literaria y publicó en 1881 el poema Eleusinia tratando el tema de los Misterios eleusinos. A la vuelta a Londres vivió en la pobreza, intentando encontrar trabajo como periodista, en una imprenta, o como profesor particular; mientras, escribía por las noches y daba largos y solitarios paseos por todo Londres.

domingo, 5 de noviembre de 2023

Vera

Vera (Véra) —a veces publicado como: Vera: una historia misteriosa (Véra : Histoire mystérieuse)— es un relato de fantasmas del escritor francés Villiers de L'Isle-Adam (1838-1889), publicado originalmente en la edición del 7 de mayo de 1874 del periódico La Semaine parisienne, y luego reeditado en la antología de 1883: Cuentos crueles (Contes cruels).

Es uno de los cuentos de Villiers de L'Isle-Adam más atractivos, narra la historia del conde d'Athol, un hombre acongojado, sumido en una profunda depresión, que intenta evocar la presencia de su esposa muerta, Vera, y de hecho lo logra cada vez con más eficacia en el transcurso de un año.

El conde de Athol está de luto: su esposa Vera murió repentinamente. Después de pasar el día en la bóveda, tiró la llave tras su misteriosa decisión de no regresar. Se encuentra en la habitación de Vera donde nada ha cambiado. El conde ya no tiene motivos para vivir. Recuerda su encuentro y sus seis meses de felicidad. Un sirviente que viene a ver a su amo se llena de terror porque el conde actúa como si Vera todavía estuviera allí. El conde ha despedido a todos sus sirvientes excepto Raymond para aislarse aún más del mundo con su belleza. Al principio escéptico y preocupado, Raymond se deja arrastrar por el espantoso espejismo de su amo, que lo asusta. El conde está convencido de estar con Vera hasta tal punto que de hecho parece haber una presencia adicional en la mansión que ocupan. Viven así durante un año. En la noche del aniversario de la muerte de la condesa, todo parece indicar que ha vuelto a su habitación. Quiere volver con quien la ama tanto. ¡Ella absolutamente debe estar en su habitación! El conde cree tanto en ella que la ve y la oye hablar con él. Se están besando. De repente, recuerda que ella está muerta y todas sus ilusiones se esfuman. Mientras llora por encontrarla, cae un objeto: la llave de la bóveda...

El autor utiliza el horror como un vehículo, y Vera es el más veloz y confortable de todos. Aquí, los muertos no sólo son susceptibles ante los reclamos, sino que retornan al ser evocados mediante el recuerdo intenso o el llanto vaporoso que se vuelca en una aparente soledad.

En este sentido, Vera no es el típico relato de fantasmas del siglo XIX, sino más bien un relato sobrenatural donde el sufrimiento de los vivos, y no su pericia en el terreno del espiritismo o del ocultismo, es en realidad el motivo principal por el que los muertos se manifiestan en el plano físico.


martes, 31 de octubre de 2023

Auguste Villiers de L'Isle-Adam

Jean-Marie Mathias Philippe Auguste, conde de Villiers de l`Isle-Adam, más conocido como Auguste Villiers de L'Isle-Adam (Saint-Brieuc, 7 de noviembre de 1838 - París, 18 de agosto de 1889) fue un escritor francés cuya obra, que abarca la poesía, el teatro y la narración, se orienta en gran parte hacia el movimiento simbolista.

Tras numerosos años de navegación, el padre de Auguste, se instaló en la mansión de Penanhoas, en Lopérec, que había heredado, y quedó lisiado por un accidente. Tuvo que buscar subsidios durante la Restauración antes de recibir los 27.000 francos del Estado en 1826 a que tenía derecho en compensación por su emigración. Entonces el marqués tuvo la idea de fundar una especie de agencia de investigación genealógica para ayudar a ciertos herederos a recuperar sus bienes incautados durante los disturbios revolucionarios y del Imperio. Pero se enredó en especulaciones financieras ruinosas y en 1843 su mujer tuvo que hacer una separación de bienes para salvaguardar su propio patrimonio. En 1845 la familia se instaló en Lannion, en casa de los padres de la madre de Augusto, la señora de Kérinou. Entre 1847 y 1855, el joven Villiers siguió estudios desordenadamente en diversas escuelas de Bretaña; estuvo interno en el pequeño seminario de Tréguier y luego en Rennes en 1848 (en el antiguo colegio de Saint-Vincent de Paul), en el liceo de Laval, de nuevo en Rennes, en Vannes (colegio de Saint-François-Xavier) en 1851, donde tuvo como condiscípulo al pintor James Tissot, y otra vez en Rennes. Además dispuso en los intervalos de preceptores religiosos a domicilio, por más que se mostraba más dotado para el piano y se descubría aficionado a la poesía. 


lunes, 30 de octubre de 2023

La Casa Vacía

La Casa Vacía (The Empty House) es un relato de terror del escritor inglés Algernon Blackwood (1869-1951), publicado en la antología de 1906: La casa vacía y otras historias de fantasmas (The Empty House and Other Ghost Stories). Es, después de todo, un relato clásico sobre casas embrujadas y fantasmas.

Relata la historia de una temeraria tía (Julia) y su sobrino (Jim Shorthouse), quienes intentan pasar la noche en una casa con reputación de estar embrujada. En cierta forma este relato fantástico de Algernon Blackwood podría ser visto como un relato de cazadores de fantasmas.

Se dice que el argumento de La casa vacía, así como algunos fenómenos paranormales que allí se describen, se corresponden con las investigaciones paranormales que realizó el propio Algernon Blackwood cuando participaba activamente de la Psychical Research Society.

A pesar de su fecha de publicación, 1906, época más bien candorosa con respecto a las casas embrujadas,La casa vacía de Algernon Blackwood no pierde tiempo y rápidamente se sumerge en una realidad alucinante; describiendo los efectos que aquel edificio produce tanto en las personas valientes, ignorantes o lo suficientemente tontas como para cruzar su umbral.



viernes, 20 de octubre de 2023

La Amante del Demonio

La Amante del Demonio (The Demon Lover) es un relato fantástico de la escritora irlandesa Elizabeth Bowen, publicado en la colección de cuentos de terror de 1945: La amante del demonio y otras historias (The Demon Lover and Other Stories).

El relato narra la extraña experiencia de la señora Drover, una mujer como cualquier otra que en su juventud se enamoró perdidamente de un caballero al que no volvió a ver. Ya en el presente, casada y con hijos, la señora Drover atestiguará el regreso de aquel viejo amante, cuya promesa está decidido a cumplir rigurosamente, a la manera del demonio.

"The Demon Lover" tiene dos temas: los efectos de la guerra en los civiles y el regreso del pasado. La historia tiene lugar durante la Segunda Guerra Mundial. La protagonista principal, Kathleen Drover, también vivió la Primera Guerra Mundial, cuando su novio desapareció.

Según un ensayo publicado en Humanities 360, la historia trata sobre la introspección del personaje principal con respecto a sus propios recuerdos reprimidos. Drover está viviendo la Segunda Guerra Mundial, y ella regresa a su casa en Londres para recuperar las pertenencias que dejó atrás.

El tema de los efectos de la guerra en los civiles aparece en las dificultades que Kathleen ha sufrido. Su novio desapareció durante la Primera Guerra Mundial. Ahora se enfrenta a los horrores de la guerra 25 años después. Las imágenes de Bowden en la historia enfatizan el dolor y la pérdida. Ella describe los moretones y las cicatrices dejadas en la casa de Londres, sugiriendo los moretones y las cicatrices en la psique de Kathleen. La descripción general de la casa genera un sentimiento de ansiedad en el lector, similar a los sentimientos que Kathleen está soportando.

El tema del regreso del pasado viene en las escenas finales de la historia. Kathleen se ha sentido culpable durante 25 años porque prometió esperar a su prometido, pero cuando él no regresó de la guerra, finalmente se casó con otro. Durante su tiempo en la casa, ella no puede detener sus reflexiones del pasado. Al final, toma un taxi para llevarla de regreso a su hogar actual en el país, pero su prometida regresada la enfrenta en forma de espectro.


Fuente:

https://es.411answers.com/a/cual-es-el-tema-de-the-demon-lover-de-elizabeth-bowen.html



martes, 17 de octubre de 2023

Elizabeth Bowen

Elizabeth Dorothea Cole Bowen (Dublín, Irlanda; 7 de junio de 1899 - Hythe, Kent, 22 de febrero de 1973) fue una escritora anglo-irlandesa.

Bowen nació en Dublín. Su familia solía pasar los veranos en Bowen’s Court, una propiedad de la familia en el condado de Cork. Cuando su padre empezó a padecer de problemas mentales en 1907, Bowen y su madre se mudaron a Inglaterra, asentándose en Hythe (Kent). Tras la muerte de su madre en 1912, Bowen se fue a vivir con sus tías: la experiencia de orfandad estuvo muy presente en sus novelas. Bowen fue educada en la Downe House School, bajo la dirección de Olive Willis. Después de pasar un tiempo en una escuela de arte en Londres, decidió dedicarse a escribir. Bowen se unió al Círculo de Bloomsbury, conociendo a Rose Macaulay, quien la ayudó a encontrar un editor para su primer libro, Encounters (1923).

En 1923, contrajo matrimonio con Alan Cameron, un administrador educativo que también trabajaba para la BBC. Bowen mantuvo varias relaciones extramaritales, incluyendo una con Charles Ritchie, un diplomático canadiense seis años menor que ella. También tuvo un romance con el escritor irlandés Sean O'Faolain y con la poeta estadounidense May Sarton.

lunes, 16 de octubre de 2023

Los Nueve Billones de Nombres de Dios

En un monasterio tibetano, los lamas quieren enumerar todos los nombres de Dios, ya que creen que el Universo fue creado para este propósito, y que una vez que se complete este nombramiento, Dios pondrá fin al Universo. Hace tres siglos, los monjes crearon un alfabeto en el que calcularon que podían codificar todos los nombres posibles de Dios, sumando alrededor de 9.000.000.000 ("nueve mil millones") y cada uno con no más de nueve caracteres. Escribir los nombres a mano, como lo habían estado haciendo, incluso después de eliminar varias combinaciones sin sentido, llevaría otros 15.000 años; los monjes desean usar tecnología moderna para terminar esta tarea más rápidamente.

Para buena parte de las mitologías, incluidos los mitos bíblicos y los mitos hebreos, el verdadero nombre de Dios es secreto.

No es un nombre oculto. Tampoco es inaccesible o indescifrable: está hecho de signos. William Blake lo encontró en el diseño del Tigre. Borges, en el Aleph. Y Arthur C. Clarke en el lenguaje informático.

Pero conocer el verdadero nombre de Dios tiene sus complicaciones. Así lo deduce Jorge Luis Borges en El golem:


Si (como afirma el griego en el Cratilo)

el nombre es arquetipo de la cosa

en las letras de rosa está la rosa

y todo el Nilo en la palabra Nilo.


Y, hecho de consonantes y vocales,

habrá un terrible Nombre, que la esencia

cifre de Dios y que la Omnipotencia

guarde en letras y sílabas cabales.


Esto significa que no hay diferencia entre el nombre y la cosa. La palabra rosa es la rosa. La palabra Nilo es el Nilo, y el verdadero nombre de Dios es Dios.

Existen muchas historias acerca de la búsqueda del verdadero nombre de Dios, pero una de ellas se destaca del resto por su exquisita originalidad.

Hablamos de Los Nueve Billones de Nombres de Dios (The Nine Billion Names of God) —a veces publicado en español como Los nueve mil millones de nombres de Dios—, relato fantástico de Arthur C. Clarke (1917-2008), publicado en la edición de febrero de 1953 de la revista pulp Star Science Fiction, y posteriormente incluido en el Salón de la fama de la ciencia ficción (The Science Fiction Hall of Fame).

Este gran cuento de Arthur C. Clarke relata la historia de unos monjes budistas, quienes han pasado siglos enteros escribiendo las distintas combinaciones posibles de letras para formar el verdadero nombre de Dios.

Si bien las posibles combinaciones en cualquier alfabeto no son infinitas, su cifra final es astronómica; de manera tal que los monjes recurren a una empresa informática para adquirir un ordenador lo suficientemente potente como para completar la tarea.

De este modo, el ordenador podrá realizar todas las permutaciones posibles de forma mucho más rápida, adelantando el mismo resultado que podría obtenerse mediante la tediosa labor manual de los monjes durante milenios, pero también adelantando el fin de los tiempos.

Porque el descubrimiento del nombre de Dios es también el descubrimiento de Dios, y no precisamente en términos espirituales.

Finalmente, los monjes compran este ordenador y lo trasladan a su monasterio, situado en el Tíbet. Hacia allí nos lleva el autor, en compañía de los ingenieros enviados por la empresa, quienes se preguntan cuál será la reacción de los monjes cuando la máquina por fin realice los últimos cálculos y el universo no se autodestruya.

El final de este breve relato de Arthur C. Clarke es, por lejos, uno de los mejores y más aterradores de la historia de la ciencia ficción.


miércoles, 11 de octubre de 2023

La Transformación

La Transformación (The Transformation) es un relato de terror de la escritora inglesa Mary Shelley (1797-1851), publicado originalmente en la edición especial de 1831 de la revista The Keepsake, y luego reeditado de manera póstuma en la antología de 1891: Cuentos e historias (Tales and Stories).

Es uno de los grandes cuentos de Mary Shelley, relata la siniestra historia de Guido, un hombre que ha desperdiciado su riqueza y que intenta recuperar a la mujer que ama, Julieta, protegida por un padre despótico. El temperamento byroniano de Guido finalmente lo conduce al destierro, y a la sutil organización de su venganza.

Durante una tempestad, desde el mar embravecido emerge una figura extraña, macabra: un enano —que bien podría ser el mismísimo demonio—, quien le ofrece intercambiar cuerpos y de ese modo satisfacer los impulsos que cada uno de ellos alberga en secreto.

Pese a que su nombre estará siempre ligado al de su novela más conocida, Frankenstein, Mary Shelley fue también autora de excelentes relatos, como las tres historias que se incluyen en este volumen. Sugerentes, insinuantes y bordeando continuamente esos ambientes sobrenaturales y tenebrosos que todo lector asocia con la autora, los tres cuentos son, por encima de cualquier otra cosa, admirables proezas de condensación.En Transformación, una de las obras maestras de la narrativa gótica, la belleza y el horror coinciden en una misma criatura de ambigua clasificación. En El mortal inmortal un ser de trescientos años relata una historia de amor y alquimia. Y, finalmente, El mal de ojo, el más extenso de los tres cuentos, catapultará al lector a costas lejanas, en un ambiente cargado de supersticiones, crímenes y destinos fatales.

Claramente La transformación de Mary Shelley es una de las piezas más exquisitas de la literatura gótica clásica. El motivo principal del relato es el pacto con el diablo, en este caso, bajo la figura de aquel enano grotesco.


lunes, 9 de octubre de 2023

El Mensajero del Futuro

El Mensajero del Futuro (My Object All Sublime) —a veces publicado en español como: Mi sublime propósito— es un relato fantástico del escritor norteamericano Poul Anderson (1926-2001), publicado originalmente en la edición de junio de 1961 de la revista Galaxy Magazine, y desde entonces reeditado en numerosas antologías, entre ellas, la colección de 1976: Lo mejor de Poul Anderson (The Best of Poul Anderson). Es probablemente uno de los mejores cuentos de Poul Anderson, desarrolla una trama increíblemente compleja y, a la vez, directa, acerca de la posiblidad de los viajes en el tiempo, que anula cualquier posibilidad de resumirla sin arruinar por compelto la historia. Por eso mismo les recomendamos a nuestros amigos que eviten los siguientes párrafos y vayan directamente al relato.

En este relato Poul Anderson crea un futuro en el cual los criminales y delincuentes son enviados al pasado, ya que esto se considera una forma humana de castigo. La historia revela el drama de un hombre acusado injustamente por un rival, y castigado de este modo, quien resuelve vengarse a pesar de estar separado de su enemigo por varios siglos de diferencia.

El autor nos narra una gran historia de un hombre que fue enviado al pasado a pagar su condena pero unos años después recibe una visita inesperada de «negocios! que va dar como resultado un nuevo sufrimirnto para este prisionero.

El mensajero del futuro rápidamente se convirtió en un clásico la ciencia ficción y el relato pulp, quizás por ser uno de los pocos relatos de viajes en el tiempo en el cual esta posibilidad consiste en un castigo, no en una aventura.


lunes, 2 de octubre de 2023

La Habitación Roja

La Habitación Roja (The Red Room) es un relato de terror del escritor inglés H. G. Wells (1866-1946), publicado originalmente en la edición de marzo de 1896 de la revista The Idler. Luego aparecería en 65 grandes cuentos de lo sobrenatural (65 Great Tales Of The Supernatural), Grandes cuentos de horror (Great Tales Of Horror), Un siglo de historias de terror (A Century Of Horror Stories) y Escalofríos: una antología de misterio y horror (Spine Chillers: an Anthology of Mystery and Horror), entre otras colecciones.

La Habitación Roja, uno de los grandes cuentos de H. G. Wells, relata la historia de un hombre de veintiocho años [el Narrador], cuyo nombre no se divulga, que visita el Castillo Lorraine, el cual se dice que está embrujado. El Narrador decide pasar la noche en la Habitación Roja con la intención de refutar las leyendas que la rodean. Un año antes, otra persona, a la que se refiere como «su predecesor», intentó llevar a cabo la misma proeza pero con resultados trágicos. El Castillo Lorraine ha estado desocupado durante un año, desde que el duque perdió la vida al caer de unas escaleras. A pesar de las vagas advertencias de los tres ancianos que custodian el castillo, el Narrador ingresa en la Habitación Roja para comenzar su vigilia. Su confianza inicial se derrumba a medida que las velas que ha colocado en cada rincón estratégico de la Habitación Roja comienzan a apagarse. Cada vez que se apaga una vela, el miedo y la paranoia se vuelven más intensas. El Narrador intenta volver a encender las velas apagadas, pero una misteriosa ráfaga de viento, que parece direccionada por una inteligencia malévola, hace que nunca llegue a completar la tarea, de modo tal que la oscuridad comienza a cerrarse a su alrededor.

La premisa de La Habitación Roja influyó en muchos relatos de fantasmas posteriores: un sujeto escéptico decide pernoctar en un lugar para probar que no está embrujado [ver: El ABC de las historias de fantasmas]. De hecho, todos los elementos que llegarían a convertirse en estereotipos del género están aquí: una mansión abandonada con una historia trágica de fondo, personas espeluznantes que pronuncian terribles advertencias, un escéptico arrogante, y la demostración final de que su escepticismo es la verdadera superstición, porque el lugar realmente está embrujado. Sin embargo, H. G. Wells nos brinda una vuelta de tuerca sublime, porque La Habitación Roja es menos una historia de fantasmas que una exploración de la psicología humana en relación al miedo.

H. G. Wells era un escéptico [aunque más tarde en su vida cambiaría un poco]; en muchos sentidos, él es como el Narrador, es decir, el tipo de persona que no se toma en serio las historias de fantasmas. En este sentido, es lícito leer La Habitación Roja como un sutil trabajo de demolición del género, incluso como una sátira. Sin embargo, hay una cosa que H. G. Wells sí se toma muy en serio: el miedo, más precisamente el poder del miedo para aplastar la razón y el autocontrol, sin importar cuán escépticos seamos e incluso prescindiendo de cualquier fantasmas. Solo necesitamos una Habitación Roja para poner a prueba nuestro cinismo en relación a lo paranormal, un lugar que no esté embrujado por espíritus o demonios, sino por el miedo mismo [ver: Psicología de las Casas Embrujadas]

La Habitación Roja, entonces, es una historia sobre algo que todos hemos experimentado: miedo: particularmente ese tipo de miedo del que no puedes deshacerte incluso cuando sabes que [supuestamente] no hay nada que temer.

El punto de H. G. Wells es que todos tenemos miedos «irracionales», miedos que la razón no puede sofocar, y eso nos pone en el lugar del Narrador. Este sujeto decide pasar la noche en la Habitación Roja porque «sabe» que los fantasmas no existen. En otras palabras, se mete en una situación en la que su razón le dice que no hay nada que temer, como un padre que le asegura a su hijo que no hay monstruos debajo de la cama; por lo tanto, cree que puede dominar con confianza y autocontrol cualquier miedo irracional. Sin embargo, como todo chico sabe, HAY monstruos debajo de la cama, tal vez no el tipo de monstruos que conjura papá con sus explicaciones racionales, pero allí están, listos para manifestarse cuando las circunstancias son apropiadas [ver: Esos monstruos debajo de la cama]

¿Realmente hay algo sobrenatural en la Habitación Roja? H. G. Wells está menos interesado en esto que en hacernos reflexionar en lo que significa tener miedo, incluso un miedo irracional, y cómo este no desaparecerá frente al razonamiento o la fuerza de voluntad. En este contexto, el miedo no es tan diferente a un fantasma, cuya sola presencia es una amenaza a la racionalidad.

Ahora bien, antes de entrar en la Habitación Roja, el Narrador conversa con los cuidadores del castillo: un anciano con un brazo atrofiado y una anciana con ojos pálidos, quienes le advierten que está siendo temerario. El anciano, además, insiste en que el Narrador está actuando por «su propia elección». En este punto entra un tercer anciano; lleva una capucha y tose repetidamente. Sigue un silencio tenso. Estas tres figuras arquetípicas y sus advertencias establecen temprano en la historia el arco del protagonista: de escéptico a creyente, y además deja en claro que sus opiniones sobre la vejez es un preludio de lo que experimentará más adelante: «hay algo inhumano en la senilidad, algo agazapado y atávico; las cualidades humanas parecen desvanecerse insensiblemente de las personas mayores». Si estos tres viejos te parecen inquietantes, espera a ver lo que hay en la Habitación Roja.

Pronto, incluso antes de que entremos en la Habitación Roja con el Narrador, H. G. Wells deja caer una imagen que impregnará el resto del relato: sombras danzantes, casi conscientes, que reaccionan ante la luz de las velas y luchan contra ellas. Hay algo primitivo en esta oposición luz-oscuridad, no tanto en términos de bien vs. mal, sino entre la luz de la racionalidad, del intelecto y la civilización, en contraste con la oscuridad de la irracionalidad, de los actos inhumanos que se cometen en las ella. «Mi vela se encendió e hizo que las sombras se cubrieran y temblaran», dice el Narrador, y agrega: «llegaron detrás de mí, y otra huyó ante mí hacia la oscuridad de arriba». Que las sombras estén antropomorfizadas es un lindo detalle, pero las sombras en la Habitación Roja se retraen, se reorganizan y finalmente avanzan contra la luz de forma sistemática.

La luz artificial tiene que ser controlada por el ser humano, depende de él, del mismo modo en que la racionalidad supone un esfuerzo por reprimir los instintos atávicos; pero la oscuridad puede moverse como quiera. Es como si H.G. Wells sugiriera que la oscuridad es el estado por defecto de las cosas, y que la luz, en términos de racionalidad e intelecto, es el intruso. El Narrador debe moverse en el reino de la oscuridad; su escepticismo es tan intrusivo e ineficaz como la luz de sus velas.

Al principio, el Narrador intenta preservar una «actitud mental científica». Examina cada centímetro de la Habitación Roja y enciende varias velas en puntos estratégicos, de manera tal de cubrir con luz la mayor superficie posible. Sin embargo, «todavía encontraba la oscuridad más remota del lugar y su perfecta quietud demasiado estimulantes para la imaginación». A partir de aquí, H. G. Wells se divierte con el lector. En cada sombra, en cada vela que parpadea, cediendo terreno a la oscuridad, esperamos la aparición de un fantasma o un demonio, pero solo tenemos a un sujeto que intenta desesperadamente volver a encender las velas que se apagan, yendo y viniendo por la Habitación Roja, dándose cuenta que está siendo tragado por la oscuridad.

Previamente el Narrador balbucea un comentario humorístico: «Se me ocurrió que cuando viniera el fantasma podría advertirle que no tropezara con las velas». Aunque esta línea es una broma para él mismo, el Narrador ha traído fantasmas a su vocabulario, pensando en ellos como existentes en el mundo de su broma. Ha comenzado su camino desde la incredulidad hacia el reconocimiento. Es entonces, inmediatamente después de este reconocimiento, que las velas comienzan a apagarse.

El Narrador, histérico, comienza a luchar contra el continuo apagado de las velas. H. G. Wells mantiene al lector en suspenso acerca de la posibilidad de algo sobrenatural en la Habitación Roja, y al final saca una carta magistral. El Narrador, ya sin ninguna luz, escapa de la habitación en una escena deliberadamente no sobrenatural, golpeándose, tropezando, cayéndose en su propia desesperación. La revelación final sobre la naturaleza de la malevolencia en la Habitación Roja es hermosa:

«¡Miedo! Miedo que no tiene luz ni sonido, que no soporta la razón, que ensordece y oscurece y abruma. Me siguió por el pasillo, luchó contra mí en la habitación.»

Por supuesto, nada te impide pensar que hay una fuerza sobrenatural que infunde tal terror que hace que las personas se maten accidentalmente; pero la sugerencia de H. G. Wells es que la entidad de la Habitación Roja es simplemente MIEDO, un miedo que, como la oscuridad, tal vez es el estado por default de la existencia humana.



Fuente:

http://elespejogotico.blogspot.com/2023/04/la-habitacion-roja-h-g-wells-relato-y.html



martes, 26 de septiembre de 2023

El Hombre que Nunca Llegaba a Joven

El Hombre que Nunca Llegaba a Joven (The man who never grew young) es un relato fantástico del escritor norteamericano Fritz Leiber, publicado en la colección de cuentos fantásticos de 1947: Los agentes negros de la noche (Night's black agents).

Este relato nos sumerge en un magnífico juego temporal, nétamente simbólico, como la mayoría de los relatos que invierten o bifurcan el trazado del tiempo. Su ejemplo más conocido, quizá, es "El curioso caso de Benjamin Button" (The curious case of Benjamin Button) de F. Scott Fitzgerald.



sábado, 10 de junio de 2023

El Jardín de Adompha

El Jardín de Adompha (The Garden of Adompha) es un relato de terror del escritor norteamericano Clark Ashton Smith (1893-1961), publicado originalmente en la edición de abril de 1938 de la revista Weird Tales, y luego reeditado por Arkham House en la antología de 1948: Genius Loci y otros cuentos (Genius Loci and Other Tales).

El jardín de Adompha, uno de los cuentos de Clark Ashton Smith más efectivos, pertenece al ciclo de Zotique, y relata la historia del rey Adompha, un gobernante que, presa del hastío, solicita la ayuda del mago de la corte, Dwerulas, para crear un jardín secreto.

No se trata de un jardín común, desde luego; sino más bien un sitio mágico, un jardín escondido, con un pequeño sol propio capaz de dar luz a distintas especies de plantas que ciertamente no son de este mundo.

Entre llas ramas y el follaje de esas monstruosas plantas se puede observar la obra macabra del mago. Las raíces voraces se alimentan de una multitud de cadáveres y extremidades, incluidas las cabezas de eunucos, las orejas de los guardias, corazones anónimos y torsos y ojos aun parpadeantes injertados en las propias plantas.

El jardín de Adompha de Clark Ashton Smith nos propone un organismo único, híbrido, una mezcla formada por restos humanos con plantas interdimensionales, logrando uno de los relatos botánicos de terror más interesantes de la época (ver: Horror Botánico: ¡el brócoli dominará el mundo!). También es interesante mencionar que el carácter disipado, decadente, del rey Adompha, acaso podría ser un homenaje al Vathek de William Beckford.



sábado, 3 de junio de 2023

El Espejo

El Espejo (The Mirror) es un relato de terror de la escritora norteamericana Mildred Johnson (¿?), publicado originalmente en la edición de septiembre de 1950 de la revista Weird Tales.

Es uno de los dos cuentos de Mildred Johnson publicados en Weird Tales, relata la historia de los últimos descendientes de una familia aristocrática, decrépita, y de una escalofriante herencia: un espejo, en apariencia, una simple antigüedad de la abuela, pero que posee la extraña cualidad de reflejar a los muertos (ver: «In Articulo Mortis»: Poe, Lovecraft y algunas opciones para retrasar la muerte)

El Espejo relata la historia de Richard y Margaret Thornber, quienes visitan la antigua mansión familiar luego del fallecimiento de Robert Thornber, con motivo de recuperar el testamento del anciano y verificar algunos objetos de valor, entre otros, una estupenda biblioteca repleta de volúmenes raros. En este contexto, los aterradores recuerdos de la infancia atormentan a Margaret, sobre todo uno en particular, relacionado con una abuela maliciosa y un espejo con propiedades asombrosas (ver: La Casa como entidad orgánica y consciente en el Gótico)

La anciana solía aterrorizar a los niños diciendo que todos los miembros de la familia estaban en el espejo: el marido a quien odiaba y los hijos a quienes amaba, porque a través de ese espejo se podía ver a los muertos.

Estos recuerdos inquietantes afloran en la mente de Margaret, mientras Richard solo está obsesionado con apropiarse de la biblioteca. Al parecer, este último pasó algunos años cuidando al viejo Robert Thornber, satisfaciendo sus pequeños caprichos seniles con el objetivo de recibir la mejor tajada de la herencia. Sin embargo, la malicia forma parte de la genética de esta familia, y el viejo Robert aun tiene una última broma diabólica entre manos (ver: Casas como metáfora de la psique en el Horror)

El testamento está guardado en el interior de aquel espejo mágico de la abuela, de manera tal que obtenerlo implica mirar en su reflejo, mirar a los muertos que ríen y se burlan desde su última morada en la cripta familiar (ver: El ABC de las historias de fantasmas)

Mildred Johnson es una autora misteriosa. Publicó apenas dos cuentos: El espejo y El cactus (The Cactus), ambos en Weird Tales. Posiblemente se trate de un seudónimo, aunque su verdadera identidad sigue siendo un enigma.


sábado, 27 de mayo de 2023

Bocetos Entre las Ruinas de mi Mente

Bocetos Entre las Ruinas de mi Mente (Sketches Among the Ruins of My Mind) —a veces titulado en español: Las ruinas de mi mente— es un relato fantástico del escritor norteamericano Philip José Farmer (1918-2009), publicado en la antología de 1973: Nova 3 (Nova 3).

Bocetos entre las ruinas de mi mente, probablemente uno de los mejores cuentos de Philip José Farmer, nos sitúa en una realidad en donde las personas son despojadas periódicamente del recuerdo de los últimos cuatro días. En este sentido, Bocetos entre las ruinas de mi mente de Philip José Farmer cuenta la historia de Mark Franham, su esposa, Carole, y sus dos hijos, Tom y Mike, quienes creen estar viviendo la noche del 28 de mayo de 1980. De alguna forma, desde que se fueron a dormir la noche anterior han perdido cuatro días de recuerdos.

Llega entonces el periódico del domingo, publicado antes de la 1:00 am, con la información necesaria para llenar las piezas faltantes. Al parecer, un objeto esférico gigantesco, que los astrónomos han estado rastreando durante tres semanas, ha cambiado de curso y se dirige directamente hacia la Tierra. Mark encuentra copias de los periódicos del jueves, el viernes y el sábado, los cuales confirman la edición del domingo. Pero no puede recordar esos cuatro días faltantes.

Solo queda una opción: irse a dormir y repetir la misma rutina de olvidos y descubrimientos, un bucle en el tiempo, que no conduce a nada.


viernes, 19 de mayo de 2023

La Diadema de Berilos

La Diadema de Berilos (título original: The Adventure of the Beryl Coronet) es uno de los 56 relatos cortos sobre Sherlock Holmes escrito por Arthur Conan Doyle. Fue publicado originalmente en The Strand Magazine y posteriormente recogido en la colección Las aventuras de Sherlock Holmes.

La trama se basa en el robo de una fabulosa diadema de 39 berilos montados en oro, perteneciente a la casa real. La joya une a su incalculable valor material el hecho de ser una de las joyas más famosas del tesoro real y uno de los bienes más preciados del Imperio. La historia comienza cuando un distinguido caballero llega, sin avisar, al apartamento 221-B de Baker Street. Con aspecto alterado, se presenta como Alexander Holder, el socio principal de Holder & Stevenson, una de las instituciones bancarias más sólidas y de mayor prestigio en el Londres de la época. Su relato nos traslada a su banco, donde un miembro de la familia real -sin decirlo, da a entender que puede tratarse del príncipe de Gales- solicita a Holder un préstamo de cincuenta mil libras durante unos días, y en prueba de garantía ofrece la famosa diadema de berilos.

Un banquero, Alexander Holder de Streatham, otorga un préstamo de cincuenta mil libras a un cliente socialmente destacado, que le deja una diadema de berilos, una de las posesiones públicas más valiosas que existen, como garantía. Holder siente que no debe dejar esta joya rara y preciosa en su caja fuerte personal en el banco, por lo que se la lleva a su casa para guardarla allí. Se despierta en la noche por un ruido, entra a su sala de vestir y se horroriza al ver a su hijo Arthur con la diadema en sus manos, aparentemente tratando de doblarla. La sobrina de Holder, Mary, llega al escuchar los gritos y, al ver la corona dañada, se desmaya. Le faltan tres berilos. En pánico, Holder viaja para ver a Sherlock Holmes, quien acepta llevar el caso.

El caso contra Arthur parece bastante claro, pero Holmes no está convencido de su culpabilidad. ¿Por qué Arthur se niega a dar una declaración de ningún tipo? ¿Cómo pudo Arthur haber roto la corona sin hacer ruido? Ni siquiera Holmes, que tiene manos excepcionalmente fuertes, puede hacerlo. ¿Podría estar implicada alguna otra persona de la casa, como el personal o Mary? ¿Podría algún visitante, como el novio con una pierna de madera, o el descortés amigo de Arthur, Sir George Burnwell, tener algo que ver con lo que le sucedió a la corona? Si no se resuelve el caso, el honor de Holder se desmoronará y habrá un escándalo nacional.

Holmes intenta no solo reflexionar sobre los detalles que le da Holder, sino también examinar las huellas y rastros en la nieve. Finalmente, Holmes resuelve el misterio, y Holder queda estupefacto al descubrir que su sobrina estaba involucrada con un notorio criminal, aunque aparentemente ella desconoce su carácter. Los dos escapan de la justicia; sin embargo, Holmes está convencido de que recibirán su castigo a su debido tiempo. El motivo de Arthur al permitir que su padre pensara que él era el ladrón fue porque estaba enamorado de su prima Mary y sospechaba que ella estaba involucrada en el robo.


viernes, 12 de mayo de 2023

El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha (Fragmento)

Don Quijote de la Mancha es una novela escrita por Miguel de Cervantes Saavedra, considerada como una de las obras cumbre de la literatura española y mundial. Publicada en dos partes en 1605 y 1615, la obra cuenta la historia de un hidalgo llamado Alonso Quijano que, tras obsesionarse con los libros de caballería, decide convertirse en caballero andante bajo el nombre de Don Quijote.

La novela está llena de aventuras y episodios cómicos en los que Don Quijote y su fiel escudero Sancho Panza recorren la región de La Mancha en busca de aventuras, enfrentándose a gigantes imaginarios, salvando damiselas en apuros y realizando hazañas imposibles, siempre con la intención de restaurar la justicia y la honradez en el mundo.

Sin embargo, la novela también es una crítica a la sociedad de la época y a los valores que se le otorgaban a la nobleza y la caballería, y aborda temas como la locura, la amistad, el amor y la libertad individual. Cervantes utiliza el humor y la ironía para subvertir las convenciones literarias y sociales de su tiempo, creando personajes inolvidables y una trama llena de sorpresas e ingenio.

"Don Quijote de la Mancha" es una obra atemporal que ha sido traducida a numerosos idiomas y ha inspirado a artistas de todo tipo a lo largo de los siglos. Su legado literario sigue vigente hasta nuestros días y su protagonista, Don Quijote, es uno de los personajes más icónicos de la cultura española.

La siguiente narración o lectura de esta obra inmortal de la literatura española y universal, es solo un fragmento de la primera parte del libro. De cuando Alonso Quijano decide abandonar su hacienda y embarcarse en la aventura caballeresca que comienza en la posada donde es armado caballero.


sábado, 6 de mayo de 2023

La Mancha en la Pared

La Mancha en la Pared (The Mark on the Wall) es un relato modernista de la escritora inglesa> Virginia Woolf (1882-1941), publicado por primera vez en la antología de 1917: Dos relatos (Two Stories), y luego reeditado en la colección de 1921: Lunes o martes (Monday or Tuesday).

La mancha en la pared es el primer cuento de Virginia Woolf en ser publicado. El relato nos sitúa en la mente de la narradora, quien nota una extraña mancha en la pared, la cual finalmente la conduce a elaborar una serie de reflexiones acerca de su propio pasado y temas como la naturaleza, la religión y la incertidumbre como principio de vida. En este sentido, La mancha en la pared de Virginia Woolf prueba que las grandes abstracciones no necesariamente surgen a partir de cuestiones trascendentales; de hecho, a veces encuentran su camino hacia la superficie de la consciencia a través de cosas tan insignificantes como una mancha en la pared, cuya naturaleza, desde luego, la autora resuelve al final.

Hay textos que se abren despacio, después de dos o mas lecturas. Emergen como experimentos de laboratorio y van formándose, con paciencia, como un mecano en la mente del lector. Textos que nacen de la confrontación, de la imperiosa necesidad de decir. Con pocos relatos he tenido una experiencia tan extraña y cautivadora al mismo tiempo que con La mancha en la pared de Virginia Woolf. Bañado en una melancolía poco común, una melancolía sólida, no blanda, como “huesos enterrados en la tierra”, una melancolía que ella tilda de inglesa, de paseos entre jardines sombríos. Es la melancolía de Orlando, aquel personaje, a caballo entre lo femenino y lo masculino, entre la fantasía y la denuncia, esa melancolía que tiñe muchas de sus obras. Virginia parte de la realidad desfigurada para iniciar su fluir de conciencia. Aparentemente, durante la primera lectura, puede parecer que el desorden ocupa el texto, que todo es un divagar por esto o por aquello. Nada más alejado de la realidad. Este relato, el primero que publicó, está organizado de tal manera que nos transporta por la vida de la autora valiéndose de símbolos, símiles, metáforas y un sin fin de pequeños senderos que van y vienen por sus inquietudes y escasas certezas. Rechazo, inconformismo, creación, guerra, literatura y un laicismo latente de la mano de la naturaleza como orden supremo.

Es un relato inquietante, donde reina un manejo magistral de la transición. Liga de manera fluida, armónica y con un ritmo cuidado, cada idea, cada regresión; y lleva al lector, en sus continuas lecturas, hasta lo más profundo de su propia conciencia. Utiliza el espejo, el reflejo, para alejarnos; y la aparente realidad para acercarnos. “Oh, sí, el misterio de la vida, la inexactitud del pensamiento…La ignorancia de la humanidad”.

El rechazo a lo doméstico, al hombre belicista, a la invisibilidad de la mujer, a la sordera del mundo y, sobre todo, el rechazo a la tradición a esa maldita tradición donde siempre parece sentirse presa. ¿Es posible contar todo esto desde el realismo? Probablemente no. No, al menos, en ese momento y por una mujer. Es por eso por lo que se inicia en esa huida del realismo acuciante para adentrarse en una prosa distinta, modernista, estética, donde el lenguaje, además de esconder, está al servicio de las emociones y las sensaciones, antes que a la razón. Quizá no tuvo más remedio que hacerlo. El tiempo, lo humano, el entorno social, todo parece tener un lugar entre “los dedos del gigante”. La autora nos embarca en los procesos creativos, en la contemplación como semilla, en la imperiosa necesidad de huir de la realidad para sobrevivir a ella. En el libro como refugio y en el poder embaucador, determinante y único de la naturaleza.

Este es un relato único, diferente, modernista, como ella, como gran parte de su obra. Un primer relato publicado, trabajado, cuidado hasta la última coma. Nada en él parece obedecer al caos, a la letra improvisada. Nada sobra.

¿Quién es ella realmente? ¿Aquello que se ve? Es o no es aquello una mancha en la pared. ¿Un clavo quizá? Qué importa lo que sea, lo interesante es dónde nos lleva.


Fuente:

https://laplazadepoeblog.com/2017/01/25/la-mancha-en-la-pared-de-virginia-woolf/



viernes, 7 de abril de 2023

Él

"Él" (He) es un relato de terror del escritor norteamericano H.P. Lovecraft (1890-1937), publicado originalmente en la edición de septiembre de 1926 de la revista Weird Tales, y luego reeditado por Arkham House en la antología de 1939: El extraño y otros (The Outsider and Others).

Es uno de los cuentos de H.P. Lovecraft menos conocido, relata la historia de un hombre de Nueva Inglaterra que se muda a la ciudad de Nueva York, y se arrepiente enormemente. Una noche, mientras vaga por Greenwich Village, se encuentra con un hombre vestido con ropas del siglo XVIII, quien le ofrece revelarle una historia verdaderamente asombrosa.

El hombre cuenta la historia de un escudero del siglo XVIII que negoció con los nativos americanos los secretos de sus rituales, relacionados con el tiempo y el espacio, universos paralelos y seres interdimensionales. Luego, el escudero asesinó a los nativos, de manera tal que solo él estuviese en posesión de aquellos secretos.

Abriendo una especie de portal interdimensional, el hombre le enseña al narrador una serie de visiones sobre el pasado y el futuro, tan aterradoras que los gritos de aquel finalmente despiertan a los espíritus de los nativos americanos. En efecto, todo parece indicar que el misterioso hombre es el escudero, que de algún modo se ha mantenido con vida desde 1768.

"Él" está inspirado en el desagrado que experimentó H.P. Lovecraft al mudarse a Nueva York tras su casamiento con Sonia Greene. Su estadía —y su matrimonio— duró poco, apenas unos años en los que participó del Kalem Club y no mucho más. Realmente detestaba la ciudad y su estilo de vida. Esto puede verse reflejado en muchos pasajes de Él, que de hecho fue escrito en el mismo año en el que H.P. Lovecraft regresó a Providence.


sábado, 1 de abril de 2023

La Máquina Ambidiestra

La Máquina Ambidiestra (Two-Handed Engine) es un relato de ciencia ficción escrito en colaboración entre Henry Kuttner (1915-1958) y Catherine Lucille Moore (1911-1987), publicado originalmente en la edición de agosto de 1955 de la revista The Magazine of Fantasy and Science Fiction, y luego reeditado en la antología de ese mismo año: Sin ataduras (No Boundaries).

La máquina ambidiestra, uno de los grandes cuentos de Henry Kuttner, y probablemente también entre los cuentos de Catherine Lucille Moore más destacados, nos sitúa en un futuro distópico, donde la sociedad ha ido perdiendo instituciones históricas, como la familia, a medida que la humanidad fue cediendo terreno ante los robots, quienes básicamente se encargan de todo.

Curiosamente, esta distopía humanitaria es, al mismo tiempo, una utopía materialista: las máquinas hacen todo el trabajo, físico e intelectual, ocupando todas las posiciones imaginables, incluso gubernamentales, mientras que la humanidad realmente no tiene nada qué hacer. Sin embargo, esta especie de sociedad paralela formada por máquinas resuelve hacer algo para cambiar las cosas.

Más allá de esto, la idea central de La máquina ambidiestra tiene que ver más con el concepto de pecado, o mejor dicho, de culpa, sin la cual sería imposible construir una sociedad basada en derechos y responsabilidades.


Catherine Lucille Moore

Catherine Lucille Moore (Indianápolis, 24 de enero de 1911-4 de abril de 1987) fue una escritora estadounidense especializada en literatura fantástica y de ciencia ficción​. Fue una de las primeras autoras de la corriente conocida como ficción especulativa. Su relato más conocido es Mimsy Were the Borogoves, en el que se basa la película de 2007 The Last Mimzy.

Hasta la adolescencia fue una niña enfermiza, lo que sin duda influyó en su personalidad introvertida. Durante sus largas convalecencias se habituó a la lectura, con la que alimentó su gran imaginación.

Comenzó a estudiar en la Universidad de Illinois, pero el crack de 1929 arruinó a su familia, obligándola a dejar sus estudios para trabajar en un banco.

Fue en esta época cuando comenzó a escribir. El machismo de la época la obligó a utilizar sus iniciales en vez de su nombre completo, a fin de ocultar el hecho de que era mujer. Su primer relato, Shambleau, fue editado en Weird Tales en noviembre de 1933. En 1936 conocería a Henry Kuttner, con quien se casó el 7 de junio de 1940. A raíz de su boda, mantuvieron una relación de colaboración también en la literatura.

En los años 1950, la ciencia ficción era un género que difícilmente daba para vivir, por lo que ambos volvieron a la Universidad y se licenciaron.

Kuttner murió el 3 de febrero de 1958 y, tras su muerte, Catherine no volvió a escribir más que algunos guiones televisivos. Cuando en 1963 se casó con el empresario Thomas Reggie, abandonó definitivamente la literatura.

Su vida transcurrió en el anonimato a partir de ese momento, apareciendo tan sólo en algunas convenciones de ciencia ficción en los ochenta hasta que muere el 4 de abril de 1987, víctima del mal de Alzheimer.

En 1998 fue incluida en el Salón de la Fama de la Ciencia Ficción a título póstumo.

Su primer relato, Shambleau, fue rechazado en un principio por Wonder Stories antes de ser publicado en Weird Tales. Fue acogido con éxito, hasta el punto de que H.P. Lovecraft, poco aficionado a las aventuras espaciales, le dedicó palabras de elogio. Catherine dedicó diferentes historias a lo largo de varios años al héroe del relato, Northwest Smith. Este personaje, vestido con un gastado uniforme de piloto e inseparable de su pistola de rayos, ha influido grandemente en muchos otros posteriores, como Han Solo (La guerra de las galaxias) o Mal Reynolds, capitán de la Serenity.

Su obra en colaboración con Kuttner a partir de 1937 y, especialmente, tras su matrimonio, fue sorprendentemente fructífera. Sus estilos se complementaban bien: él se encargaba de los argumentos y la acción mientras que ella se ocupaba de en las descripciones y la ambientación. Así, si bien ambos habían escrito con anterioridad con cierto éxito, las obras realizadas en común resultaron ser mejores que la suma de ambos: las historias estaban salpicadas de humor e ideas novedosas a la vez que escritas en un estilo aparentemente sencillo.

Debido a su condición de mujer, muchas de las historias que escribió con Kuttner aparecieron sólo con el nombre de él (juntos escribieron con los seudónimos colectivos de Lewis Padgett y Lawrence O'Donnell).